Busca en el blog :)

  • Twitter
  • Facebook
  • Google+
  • RSS Feed

jueves, 23 de junio de 2011

Mi segunda vida_Cap dieciocho

2 comentarios:
 
Capitulo Dieciocho
Último día
Bella POV
-Te vamos a extrañar…-dijo Eleazar abrazándome como despedida. Le devolví el abrazo con fuerza.
No podía creer que los días habían pasado tan rápido y ya tuviera que partir a mi maldito trabajo. Los rostros de todos los integrantes de mi familia eran de dolor y me rompían el alma, pero tenía que irme, por su bien.
-Yo igual, –le contesté suspirando cansada antes de soltarlo y alejarme- a todos…-aclaré con una sonrisa triste en mi rostro- Prometan que se cuidaran, ¿si? –les pedí mientras Josh se acercaba a mí con mi pequeña maleta en su mano. Todos asintieron tristes- Adiós, -dije antes de que comenzáramos a caminar con Josh hacia el bosque.
Él me iba a acompañar hacia la casa de Tiffany, solo para pasar un poco mas de tiempo conmigo. Caminamos en silencio, sin mirarnos, hasta casi sin respirar. Cuando él rompió con el silencio.
-¿Qué…le digo a los Cullen si preguntan por ti? –preguntó mirándome.
Medité la pregunta durante unos segundos. Si les llegaban a decir la verdad, no dudarían en irme a buscar, y no podía arriesgarlos de esa forma…sobre todo a…Edward.
-No les digas donde estoy, -contesté mirando mis pies mientras caminábamos- solo…diles que me fui a un viaje y que no sabes cuando volveré…
-No volverás tan pronto como nos gustaría, ¿cierto? –medio afirmó, medio preguntó Josh. Asentí triste y con desgana.
Escuché el bufido enojado de Josh. Levanté mi cabeza para verlo con los ojos cerrados, el ceño fruncido y las manos cerradas en puños. Gracias a la última acción, el manojo de mi maleta se partió, haciendo que la misma cayera al suelo. Prácticamente, el manojo, quedó hecho trizas, cenizas. Él reaccionó al sentir la “tierra” del manojo en sus manos.
-Lo siento, -se disculpó apenado viendo el desastre que había echo.
Josh se arrodilló en el suelo a levantar mis cosas, ya que la maleta se había abierto y había esparcido mis cosas por todos lados. Interrumpí sus acciones cuando me arrodillé en frente suyo y lo abracé con todas mis fuerzas, antes de comenzar a sollozar. Él me devolvió el abrazo con la misma intensidad.
-¡Como odio cuando tienes que irte! –protestó mi amado hermano.
-Igual yo…-le contesté separándome de él antes de que ambos empezáramos a reír, pero nuestra risa era débil, con tristeza.
Ayudé a Josh a levantar mis cosas, y una vez que estaban guardadas, nos levantamos y fuimos abrazados hasta la casa de Tiffany, quien nos esperaba en la puerta con la misma cara de tristeza y preocupación que la mía.
-Hola, cariño –me saludo con un abrazo y un beso en la mejilla. Sonreí en respuesta.
Tiffany tenía casi la misma edad que Eleazar, por lo tanto era mucho mayor que yo, pero aún así, nos llevábamos muy bien.
-Hola, Tiff –le saludó Josh. Ella le tendió su mano como saludo.
-Hola, Josh. Tanto tiempo…-comentó Tiffany con una sonrisa. Josh asintió con una sonrisa forzada.
-Iré adentro a prepararme –dijo Tiff antes de pegar media vuelta y meterse adentro de su casa.
-Hora de la despedida…-dijo Josh unos segundos después que Tiffany se fue.
-Josh, ¿puedo pedirte un favor? –le pregunté con tristeza.
-Sí, cariño, por supuesto –me contestó con amabilidad y dulzura.
-¿Le puedes dar esto a Edward? –le pregunté sacando un sobre de mis bolsillos y entregándoselo a él.
-Claro, preciosa –dijo recibiendo el sobre y guardándolo en su bolsillo.
Nos volvimos a fundir en un abrazo de despedida, antes de que él se girara y corriera camino al Instituto, ya que todos mis hermanos estarían allí, como mi visión me lo había mostrado. Solo esperaba que Edward, no reaccionara como mi visión me lo había mostrado, y eso dependía de mi carta...
*Flashback*
Luego de la discusión que tuvimos con Nicky, estaba en mi cuarto terminando de hacer mi maleta con desgana. No quería irme, no quería dejar a mi familia aquí, no quería dejar a Edward…
“Edward…” pensé suspirando mientras me sentaba en mi cama, relajándome un poco, cuando tuve una visión…

Mis hermanos llegaban al Instituto, luego de que yo me había ido a Volterra, cuando en el Instituto se encontraron con los Cullen.
-¡Hola! –saludó Alice muy animada- ¿Dónde está Bella? –preguntó con el ceño fruncido.
Edward, al ver que yo no estaba comenzó a preocuparse, y demasiado.
-Bella, -empezó Sophy a explicar- tuvo que irse a un viaje…-dijo con la cabeza baja.
-¿Un viaje? –preguntó Edward confundido.
-Sí, es algo difícil de explicar, -comenzó Jaime pero Josh lo interrumpió.
-Ella no volverá dentro de un largo tiempo, -dijo exasperado a Edward- pero cuando vuelva les dará las explicaciones que necesitan…-dijo a todos antes de soltar a Sophy, ya que estaban de la mano, e irse adentro del Instituto.
-Lo siento, -se disculpó Sophy antes de salir corriendo en dirección a donde se había ido Josh, seguida por Jaime y Nicole.
   -¿Vieron sus rostros? –preguntó Emmet preocupado.
-Sí, y voy a averiguar que ocurre…-dijo Edward antes de salir corriendo dirección a mi casa.
Cuando Edward, llegó a mi casa, le pidió explicaciones a Eleazar y Carmen, y ellos se las dieron. Ellos le contaron toda la verdad, y Edward no tardo en reaccionar demasiado preocupado y programar el viaje hacia Volterra.

Volví a la realidad. Sentí a mi corazon muerto como si estuviera latiendo a mil por hora, aunque fuera imposible.
“Edward no debe hacer eso, no debe saber…” pensé demasiado preocupada, cuando otra visión me atrapó…

-¿Qué haces aquí, Edward? –le pregunté cuando entré en el gran salón, donde siempre nos reuníamos todos los de la guardia de los Vulturi.
-Bella, -dijo antes de que Jane usara su don contra él.
-¡NO! –grité con todas mis fuerzas y con intención de correr hacia él, pero otros integrantes de la guardia me agarraron por atrás- ¡Suéltenme! –grité tratando de sacudírmelos de encima, pero era imposible, sobre todo gracias a Darren; su don era repeler cualquier don de otro vampiro, por lo tanto no podía si quiera pensar en usarlos.
-Lo lamento, mi querida Bella, pero él rompió con la armonía de mi hogar –dijo Aro haciendo seña a Jane para que continuara.
Edward no dejaba de retorcerse de dolor en el suelo, trataba de no gritar, pero era tanto el dolor que seguramente sentía, que no podía evitarlo.
-Ningún otro vampiro que ha entrado de esa forma aquí, a salido con vida…-dijo Cayo mirándome con desafío.
 Un gruñido feroz salió de mis labios en su dirección.
-Cayo, tiene razón –fue lo único que Marco dijo antes de hacer seña de muerte hacia Edward.
Aro suspiró con una sonrisa malvada en su rostro antes de hacerle seña a los vampiros que me tenían a mí para que me sacaran del lugar.
-¡NO! –medio grité, medio gruñí mientras ellos comenzaban a arrastrarme hacia fuera.
-B-bel…la…-alcanzó a decir Edward entre medio de los retorcijones de dolor mientras Aro comenzó a acercarse a él.
-¡EDWARD! –grité con todas mis fuerzas, pero fue en vano, Aro ya lo había matado.

-¡Nooo! –grité desesperada volviendo a la realidad.
Eso no podía ocurrir, eso no podía volverse realidad. Tomé apresurada una hoja y una lapicera y comencé a escribir una carta para Edward, esperando que la leyera e hiciera lo que le pedía.
*Fin del flasback*
_________________________________________________________________________________
Dejen coment!! ♥

2 comentarios:

  1. dios es fascinante la historia....Besos...

    ResponderEliminar
  2. no he podido dormir me he leido 18 capitulos y no he podido parar son las 5:27 am y no me puedo dormir no puedo parar de leer esta uenisimo

    ResponderEliminar

 
© 2012. Design by Main-Blogger - Blogger Template and Blogging Stuff